Un guiso de carne muy sencillo, se hace en poco tiempo y va a gustar a todos. En esta ocasión utilicé solomillo, y es que tenía unos cuantos medallones en el congelador y tenía que gastarlos ya, pero se suele utilizar babilla o cadera, o la carne que más os guste para guisar, además el carnicero os puede aconsejar cual utilizar y que os asegure que quede tierna.
Es un plato que podemos preparar con antelación, que se puede preparar la víspera y que, incluso, podemos llevar en un “taper” para comer en el trabajo o donde sea. No tiene ninguna complicación, es fácil y rico, y las setas dan a este plato un rico sabor a bosque, y, aunque las setas son deshidratadas, se pueden poner frescas o bien champiñones, pero si no os gustan las setas, sin ellas también está rico este plato.
Ingredientes para 4 personas:
600g de carne de ternera para guisar
4 cucharadas de aceite
1 cebolla tierna
1 diente de ajo grande o 2 pequeños
150ml de vino blanco
60g de setas deshidratadas
300ml de agua o caldo
1 ó 2 hojas de laurel
6 granos de pimienta negra
Pimienta negra recién molida
Aceite de oliva virgen
Sal
La carne se cortará en dados, y si tiene partes con grasa se la quitamos, que quede bien limpia de grasa, nervios, ternilla, … Por otro lado, escogemos las setas, que haya un poco de cada una de las que vienen en el envase.
En una cacerola o sartén con tapa, pondremos el aceite a calentar, unas 4 cucharadas de aceite aproximadamente. Troceamos la carne en dados del tamaño que queráis y la doramos por todas partes. Cuando el aceite esté caliente añadimos la carne y la rehogamos para que se dore por todas partes. No ponerle sal. Cuando se hayan dorado por un lado y les demos la vuelta ya podemos salpimentar.
Cortamos la cebolla y los ajos en juliana, pero si queremos que la cebolla y el ajo no se aprecie al final del plato, picar ambas cosas finamente. Añadimos también, la pimienta en grano y el laurel, que hemos pasado previamente bajo el chorro de agua.
Seguimos rehogando la carne, si hiciera falta algo más de aceite se lo añadimos. Cuando la cebolla ya este tierna le añadimos el vino, y dejamos que cueza un par de minutos para que se evapore el alcohol.
Añadimos las setas. Rehogamos el conjunto un minuto o dos y cubrimos con agua, solo lo justo. Las setas como van a cocerse junto con la carne no hace falta que las hidratemos con anterioridad, ya que se irán hidratando durante la cocción, y en este mismo agua van a soltar todo su sabor. Dejar cocer hasta que la carne esté tierna, aproximadamente 1 hora, probar de sal y para que no se evapore el agua muy pronto le pondremos una tapa.Si no os gustan las setas, al ser deshidratadas las podemos moler, en este caso hay que poner menos cantidad, más o menos la mitad.
Podemos presentar este plato con un puré de patatas.
O bien, simplemente el guiso con una rica ensalada.
Y por supuesto, como he dicho anteriormente, se puede llevar en el “taper”.