Es una entrada muy apetitosa, la mezcla de las verduras con las gambas y los huevos hace que sea un plato muy completo, además es un revuelto muy suave. Se puede servir, además de como un entrante para compartir, como como plato principal, y añadiendo una rica ensalada qué más podemos pedir. Si se tienen habitas de temporada mucho mejor, pero estas habitas que se encuentran en aceite son una delicia, y nos hace el trabajo más fácil.
Ingredientes:
100-150 g de gambas limpias
1 manojo de ajetes
4 cucharadas de habitas en aceite
4 huevos
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Para la ensalada:
Rúcula
Almendras tostadas
Tomates cherry o cereza
Aceite de oliva virgen extra
Vinagre de Jeréz
Sal
.
El revuelto es para dos personas si va a ser el primer plato, sino puede ser para 6 personas si es como un entrante para compartir.
En primer lugar limpiamos los ajetes y los troceamos. Ponemos una sartén con unas 4 cucharadas de aceite y rehogamos los ajetes con una pizca de sal durante 5 minutos. Cada ingrediente ha de tener su pizca (pizquita más bien) de sal, así que éstas deben de ser pequeñas, no os vayáis a pasar y quede luego salado el revuelto.
A continuación, añadimos las habitas, poniendo otra pizca de sal, y volvemos a rehogar un par de minutos.
Incorporamos las gambas peladas, les ponemos su pizca de sal y salteamos un minuto, luego se terminarán de hacer con los huevos.
Echamos los huevos en un plato, los rompemos ligeramente, no hay que batirlos, e incorporamos otro par de pizcas de sal. Removemos un poco, para que la sal se mezcle con los huevos, y los volcamos sobre la sartén con las verduras y las gambas. Removemos con una cuchara de madera o una espátula, han de quedar poco cuajados, así que hay que remover continuamente hasta que estén ligeramente cuajados y servir inmediatamente.
En esta ocasión he acompañado el revuelto con una ensalada de rúcula, con almendras y tomates cherry. Se aliña ligeramente con sal, vinagre y aceite.