Que ricos son los bizcochos caseros, y, además de ser más sanos que los que se compran, son fáciles de preparar y se hacen en poco tiempo. En el A, B, C de las Recetas tenéis un montón de bizcochos, preparados con yogur o con leche, además de un reportaje sobre los bizcochos muy interesante. Así que añadimos uno más a la ya larga lista, esta vez con sabor a chocolate, diferente a otro que ya está puesto, en esta ocasión he utilizado chocolate Nestlé postres intenso. Aunque yo he mezclado todos los ingredientes en la thermomix, se puede hacer con una batidora de mano.

 

Ingredientes:

100g de chocolate Nestlé postres intenso (4 barritas)

1 y medio vaso pequeño de leche

1 vaso pequeño de aceite de girasol

2 vasos pequeños de azúcar

3 vasos pequeños de harina de repostería

3 huevos

1 sobre de levadura

Cáscara de una naranja

 

 

Antes de empezar encendemos el horno a 200ºC. La rejilla un poco más abajo de la mitad y solo con la parte de abajo encendida.

La cáscara de la naranja la rallamos, si no se utiliza la thermomix, por lo demás es ir mezclando los ingredientes en el mismo orden. Como habéis visto se utiliza como medida un vasito, se puede hacer con yogur y utilizar el vaso del mismo yogur.

Ponemos el azúcar en el vaso y lo pulverizamos. Por otro lado, con ayuda de un pelador, quitamos la piel a la naranja. De esta forma solo utilizamos lo naranja, ya que el pelador no profundiza y evita que cortemos lo blanco de la naranja.

Ponemos la cáscara de la naranja en el vaso con el azúcar ya molida.

Añadimos 1 vaso de harina y ponemos velocidad creciente hasta llegar al máximo unos segundos, para que quede todo bien pulverizado. El motivo de añadir la harina es para que no se humedezca el azúcar y así quede la cáscara de la naranja totalmente pulverizada (como veis en las fotos, el antes y el después). Si se ralla la naranja no hay que poner la harina hasta el final de la preparación.

Ponemos el chocolate con la mitad de la leche a calentar, se puede hacer en el microondas. Una vez esté caliente la leche el chocolate se derretirá con facilidad removiendo con una cuchara, echamos la leche restante y mezclamos bien otra vez. Añadimos el aceite, los huevos y el chocolate en el vaso. Mezclamos en velocidad media.

Añadimos la harina y la levadura, previamente tamizadas, es mejor, para que no se formen grumos y se mezcle con mayor rapidez. Mezclamos a velocidad media-alta.

Encamisamos el molde, echamos la mezcla y metemos al horno. Yo suelo utilizar el de corona, quedan geniales, porque el calor se reparte mejor.

El aroma es un chivato, cuando comienza a oler la casa al bizcocho es que está ya casi listo, unos 35 minutos más o menos. Probar pinchando con un palillo de brochetas y si sale limpio es que ya está. A mi me gusta dejar un par de minutos el bizcocho solo con la opción ventilador, así la parte de arriba se hace un pelín más, se dora un poco más con el calor residual que tiene el horno. Lo sacamos del horno.

Esperamos un poco a que se enfríe, unos 15 minutos, y desmoldamos. Vemos que ha quedado muy esponjoso.

En el corte se aprecia mejor la esponjosidad. El sabor es a chocolate, chocolate, eso sí, es un bizcocho, así que no lo comparéis con las tartas de chocolate, que llevan muchísima más cantidad de chocolate. Este es un bizcocho para los desayunos y las meriendas.