La fruta es el mejor de los postres, pero si encima nos la dan pelada, mejor. Esta vez es mucho mejor, ya que las manzanas van peladas y asadas, en gajos no muy gruesos, para que nada más tengamos que hacer una cosa, ir pinchando con el tenedor y comerla. Se hace en el microondas (m.o.), es tan fácil y tan rápido que sé que las váis a hacer. Simplemente así son deliciosas, pero para aquellos que les guste más dulce pueden espolvorear azúcar por encima, o ponerle miel, también podéis darle un sabor extra, para ello espolvorear canela molida, o vainilla, … o con un licor, todas estas formas de hacerlo ya es a vuestro gusto.

Ingredientes:

Manzanas golden amarillas

Véis que no hay más ingredientes que la fruta, las manzanas solamente, eso sí, cuando digo amarillas es porque así están más maduras y por consiguiente más dulces. El tamaño no importa, lo digo porque las que son de calibre más pequeño son más económicas, así que esas mismas nos valen, y además así no son tan grandes para ir comiéndolas, es el tamaño justo. Vamos a utilizar también film transparente de cocina.

El microondas lo pondremos en una potencia baja, para que así se hagan lentamente sin que se rompan.

Cortamos las manzanas en cuatro partes y las vamos pelando quitandoles el corazón.

A su vez vamos a cortar cada cuarto en tres gajos, y de un grosor como muestra la foto, más o menos 1 cm.

Los gajos de las manzanas los colocamos en un plato llano, que queden repartidos los gajos por todo el plato, no importa que estén unos encima de otros. Tapamos bien con film transparente y metemos al microondas durante 7 minutos, sacamos y comprobamos, presionando con el dedo, cómo esta de tierno.

Todo dependerá de la manzana y del grosor, pero posiblemente haya que darle otros 3 minutos más de cocción, que son los que yo le doy siempre. Dejamos que se enfríe con el film sin quitar y justo antes de comerlas se lo quitamos. Pueden comerse templado o frio, y si sobra se guarda en un envase herméticamente cerrado para otro día.