Este solomillo queda muy jugoso, eso sí, si no nos pasamos de tiempo en el horno. No hay nada peor que la carne muy hecha, pero para gustos los colores, por eso para aquellas personas que les guste más hecho, se les puede pasar la carne por la sartén antes de servila, así de este modo cada uno lo degustará a su gusto. Como veis es muy sencilla, yo le pongo jamón de York en su interior, pero ponerle queso a la receta es otra forma de presentarlo. Se puede rellenar como se quiera, incluso con ciruelas pasas, frutos secos, …, todos estos ingredientes hace que sea más especial el solomillo.   

Ingredientes:

1 solomillo de cerdo (dependiendo de cómo sea de grande será para dos o tres personas)

Bacón en láminas finas

Lonchas algo más gruesas de Jamón de York o de pavo

500 g de champiñones

Pimienta negra

Sal

Aceite de oliva virgen

 

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Lo primero que se hace es limpiar el solomillo de grasa y tendones.

Seguidamente lo abriremos en dos a lo largo, como si fuera un libro.

Salpimentar al gusto. Colocamos las lonchas de Jamón de York repartidas por encima del solomillo.

Cerramos el solomillo y comenzamos a envolverle con las lonchas de bacón. Si éstas tuvieran corteza o ternillas se las quitamos para que sea más agradable a la hora de comer.

Una vez que está totalmente envuelto lo colocaremos sobre la bandeja que va a ir al horno. El horno deberá estar previamente encendido a 250ºC.

Lavamos y limpiamos los champiñones, los cortamos en cuatro partes si son grandes y en dos si son pequeños, aunque se puede cortar como más os guste. Los saltearemos en una sartén con un poco de aceite y a fuego vivo durante un par de minutos. Le añadimos un poco de sal y, si os gusta, también pimienta recién molida, e incluso si queréis darle un toque picante añadir una guindilla.

Los echamos alrededor del solomillo y lo metemos al horno.

Todo dependerá del tamaño del solomillo, o si ponemos más de un solomillo, el tiempo que va a estar en el horno, pero alrededor de unos 20 a 30 minutos ya estará listo. Os recuerdo que es preferible que la carne quede algo sonrosada en el centro y no seca, ya que siempre se puede poner un poco más de tiempo en el horno o, una vez hechos los medallones, pasarlos por la plancha. Además la carne en la parte más estrecha del solomillo estará más hecha, así que dejad esta parte para quienes les guste así. En los últimos minutos pondremos el grill, y cuando esté dorado los sacamos y dejamos reposar bien tapado unos minutos.

Cortamos en medallones y servimos el solomillo acompañado de los champiñones y un poco del jugo que ha soltado por encima.

Este plato se puede llevar en un taper para comerlo en el trabajo o donde sea, solo con calentarlo en el microondas tenemos un plato bien rico.