Los rollitos de primavera es posible que sean lo más solicitado en los restaurantes chinos, y a su vez lo más conocido. Es curioso que a los niños que no les gustan la verdura, y estas verduras, los coman con tanto gusto, así que hay que aprovechar la ocasión para que coman verduras, aunque sea así. Estas son las verduras clásicas que encontramos en estos rollitos, pero se pueden poner otras verduras. Los rollitos son tan fáciles y se hacen tan rápido que merece la pena hacerlos, además salen un montón por muy poco dinero, y sólo por esto merece la pena. Siempre tenemos la posibilidad de congelar, de forma que podemos hacer para el mismo día que los vayamos a comer y guardar para otras ocasiones. La salsa sí que es una cosa que merece la pena comprarla, pero los rollitos se pueden acompañar con salsa de tomate, o incluso con ketchup.
Ingredientes:
1 paquete de obleas
2 cebollas grandes
2 zanahorias grandes
1 repollo pequeño o medio de tamaño mayor
1 bote grande de brotes de soja
Aceite de oliva virgen
Sal
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En primer lugar cortamos las verduras, comenzamos con la cebolla, que pelamos cortamos por la mitad y la hacemos en tiras finas, o juliana. Ponemos una sartén al fuego con 6 cucharadas de aceite. Echamos la cebolla y la dejamos que se vaya haciendo lentamente, a fuego bajo.
Mientras pelamos y cortamos en tiras finas, o juliana, las zanahorias, del mismo tamaño, más o menos, que las demás verduras. Las añadimos a la sartén. Seguimos rehogando y removiendo con cuchara de madera.
El repollo que sea el blanco, no el hojas verdes, es más fina la hoja y al ser de un color claro se aprecia menos el verde de la verdura. Quitamos el tronco de las hojas, y a continuación lo cortamos en juliana fina como las anteriores verduras. Seguimos rehogando. Añadimos una cucharada pequeña de sal.
Cuando la verdura esté blanda añadimos los brotes de soja, escurriendo bien antes de incorporarlos para que no tenga nada de agua. Rehogamos un par de minutos más. Probar de sal por si fuera necesario poner algo más.
Las obleas las vamos introduciendo en agua fría, las sacamos en cuanto se han puesto blandas y las colocamos sobre un paño húmedo.
Vamos rellenando las obleas y las cerramos como se ve en el paso a paso de las fotos. Si se van a congelar es en este momento cuando se envasan y se meten al congelador. Preferiblemente es mejor congelarlos por separado en una bandeja, y después ya se pueden juntar, de esta forma se podrán ir sacando fácilmente los que se quieran sin que estén pegados entre sí.
Ponemos en una sartén aceite, que a los rollitos les llegue hasta la mitad o más. Dejamos que se doren por un lado y después les damos la vuelta para que se doren por el otro. No poner muchos a la vez, ir por tandas. En la freidora salen muy bien.
