Esta es una sopa fácil de hacer y muy rica, además es un plato exclusivo porque fue creado hace muchísimo tiempo por mi madre, que tiene ya muchos años.

Para esta receta necesitamos pocos ingredientes, ya que el ingrediente principal son los espárragos.

Ingredientes para 3 a 4 personas:

1 manojo de espárragos

1 cebolla

1 cucharada de harina

Aceite de oliva virgen extra

Sal, pimienta en grano, cominos, ajos y perejil

Comenzaremos limpiando los espárragos, los lavamos bajo el chorro del agua fría y después comenzamos a trocearlos, y lo más fácil y, para mi, lo mejor, es tronchando. Hay que tener en cuenta que el espárrago tiene una base más dura y que por lo tanto no utilizaremos, ya que es muy fibrosa y al comer no es agradable, así que cuando al tronchar el espárrago haya una resistencia y no podamos hacerlo es hasta ahí donde es tierno y a partir de ahí leñoso. Posiblemente la mayoría sabéis cómo hacerlo pero para todas aquellas personas que lo desconocen o están aprendiendo les va a venir muy bien, con estos tres pasos que muestran las fotos se ve cómo se hace. Tomamos un espárrago con una mano y con la otra comenzamos por la punta, sujetamos con los dedos como se ve en la foto y tiramos hacia nosotros, se troncha con mucha facilidad, y así haremos sucesivamente hasta que no podamos partir más de ese espárrago. Hay que ir cortando piezas pequeñas para que al comer puedan entrar perfectamente en la cuchara.

Por otro lado machacamos en un mortero unos 8 granos de pimienta y 12 de cominos, aproximadamente, no abusar de los cominos ya que es una especia que aporta mucho sabor. Picamos dos dientes de ajo y un manojo pequeño de perejil y machacamos junto a las especias.

Comenzamos poniendo en una cazuela un chorro de aceite, si se tiene la olla rápida se hace en menos tiempo. Troceamos la cebolla finamente y la pochamos.

A continuación añadiremos los espárragos troceados y rehogamos el conjunto dos o tres minutos.

Añadimos la harina y volvemos a remover bien para que la harina se tueste y no sepa la sopa a harina.

Cubrimos de agua y añadimos el majado. Ponemos sal a la sopa y tapamos.

Si es en olla rápida, al mínimo, la sopa estará lista en 20 minutos, si es en olla normal el doble. Una vez hecha probar de sal y rectificar si fuera necesario. Este plato se puede hacer con antelación e incluso la víspera, además de que podemos congelar si ha sobrado algo o queremos guardar para otro día.