Las pastas son un dulce que es fácil de elaborar, y son excelentes para acompañar en el desayuno o cuando se tienen invitados, para cualquier momento del día. Ahora para estas navidades vienen de perlas, se pueden tener preparadas con antelación y, guardadas en una lata, se conservan por muchos días, quizás sean menos días de lo que pensamos, por lo poco que van a tardar en comerse, estas pastas están muy ricas.

Ingredientes:

125 g de almendra cruda molida

120 g de azúcar

120 g de aguardiente

120 g de aceite de girasol

300 g de harina

1/2 cucharadita de canela en polvo

Ralladura de 1 limón

En un cuenco amplio ponemos el azúcar y la canela.

A continuación incorporamos la almendra.

Añadimos el aceite.

Y el aguardiente.

Mezclamos bien.

Incorporamos la ralladura del limón.

Ir añadiendo la harina poco a poco por si no hiciese falta echar toda, o quizás haya que poner un poquito más, todo dependerá de la harina.

Una vez que ya no se pueda mezclar con las varillas, ponemos la masa en la encimera y seguimos amasando e incorporando harina.

La masa no ha de quedar demasiado dura, simplemente cuando ya no se pegue la masa a las manos es que ya estará lista.

Extendemos la masa con un rodillo y vamos cortando las pastas. Si tenemos cortapastas de diferentes formas quedaran muy bien, pero sino con un vasito pequeño se puede hacer perfectamente. Las vamos colocando en una bandeja de horno, en el que hemos puesto previamente papel de horno.

Horno con ventilador, arriba y abajo a 180 ºC unos 10 a 15 minutos, dependiendo del grosor que hayamos hecho y del horno, mirar de vez en cuando hasta que estén doradas. Hay que poner la bandeja un poquito por debajo de la mitad de la altura del horno. Conviene guardarlas en una lata que cierre bien, de esta forma nos aseguramos que duran más tiempo, eso sí, hay que guardarlas cuando estén ya frías.