Un plato sano, económico y que seguro que gusta a todos. Lo tiene todo, verduras y carne, más completo no puede ser. Se pueden tener preparados y darles el último toque, horneándolos, un poco antes de comer. No tienen ninguna dificultad a la hora de hacerlos y son ingredientes que se tienen todo el año.

Ingredientes:
2 calabacines medianos (uno por persona)
250 g de carne picada de pollo aproximadamente (depende de cómo sean los calabacines de grandes)
1 cebolla grande
Queso rallado (al gusto)
Aceite de oliva
Sal
Lavamos y partimos trasversalmente, a lo largo, los calabacines.

Ponemos una cacerola con agua y sal al fuego, introducimos los calabacines y los dejamos hervir suave durante unos minutos.

Mientras picamos fino la cebolla y rehogamos en una sartén con un poco de aceite.


Añadimos la carne picada salpimentada al gusto, rehogamos de nuevo hasta que la carne esté hecha.

Sacamos los calabacines y los vaciamos con cuidado con un sacabolas, como se ve en la foto.

Picamos bien la carne de los calabacines y la mezclamos con la carne, dejando que se mezcle bien todo.


Rellenamos los calabacines.

Los cubrimos con queso rallado y metemos al horno a gratinar hasta que el queso se funda y estén dorados.

Aquí tenéis el plato terminado.
