Que ricos los guisos de patatas, os dejo con esta receta que va a gustar a todos. Una buena idea es hacer este guiso con las mini salchichas, así a los niños les gustará mucho, más que nada por la visión de ver las salchichas enteras. Sencilla y económica, y estoy casi segura de que la vais a repetir, y más si hay niños en casa.

Ingredientes (para 2):

2 salchichas Frankfurt (que sea buenas, de las grandes y gordas)

4 patatas medianas

1/2 cebolla

1 o 2 dientes de ajo

2 hojas de laurel

Sal

Aceite de oliva virgen extra

Pimienta negra

Picamos muy fino los ajos. Hacemos lo mismo con la cebolla. En una sartén ponemos un chorro de aceite y, cuando esté caliente, incorporamos lo que acabamos de picar. Rehogando durante unos minutos.

Cortamos las salchichas en trozos, las incorporamos a la cazuela y rehogamos unos minutos más.

Añadimos las patatas cortadas en trozos, el corte ha de ser chascando la patata, es decir, hacemos un corte con el cuchillo a la patata, pero sin llegar a cortar ese trozo entero, y cuando este casi el cuchillo al final de corte, hacemos un giro con la mano chascando la patata y de esta forma la terminamos de cortar. Se dice que al hacerlo así el caldo engorda y queda más espeso. Para mí, además del anterior, el mejor truco está en dejar los últimos minutos destapada la cazuela. Rehogamos las patatas unos 3 o 4 minutos más.

Incorporamos el laurel y la pimienta negra recién molida.

Echamos agua hasta cubrir todo, ponemos también un poquito de sal, y dejamos cocer durante unos 45 minutos a 1 hora, hasta que la patata esté tierna.

Probamos de sal y vemos cómo está la patata de tierna. En el primer caso, añadimos más sal si es necesario, y en el segundo dejamos cocer un poquito más. Si vemos que el agua se consume se puede añadir algo más, para que siga la cocción hasta que la patata este tierna y el caldo a nuestro gusto. Dejamos reposar 10 minutos y listo para comer.