De este pincho no hay nada inventado, es simplemente la forma de presentarlo. Esta crema ya la puse hace mucho, quien la haya hecho sabrá lo rico que está, y es una tapa muy fácil y que se puede hacer con antelación. Espero que esta presentación os guste por lo simpática que queda y lo fácil que es a la hora de ir cogiendo el pincho.
Ingredientes:
Queso crema (ver receta)
Colines de pan
Una vez que hayáis preparado el queso crema, que puede ser del que más os guste, podemos comenzar a prepararlos. Se puede hacer la cantidad que se quiera, al gusto.
Vamos tomando pequeñas porciones de crema y hacemos con ella bolitas, la crema debe de estar fría para que así sean más manejables. Podemos mojarnos las manos ligeramente con agua fría, así se deslizarán mejor entre las manos.
Han de ser porciones pequeñas para que al mezclar en la boca el queso y el colín no sea demasiado queso, una vez se introduce entero en la boca ha de ser un bocado acorde con ambos ingredientes.
Introducimos un colín en cada una de las bolas de queso, sin que este sobresalga del otro lado de la bola, y lo vamos colocando en una bandeja.
Hoy encontré una tarrina de queso roquefort a punto de caducar la fecha preferente y he preparado la receta que me encanta porque soy fan del cabrales y el roquefort. Esa ha sido mi comida de hoy, la ensalada de judías verdes y zanahorias junto a estos chupachups. ¡Y viva el régimen del endrocrino! 🙁