Me encantan las berzas, es una verdura con mucha personalidad, intensa y de mucho sabor. Las patatas al vapor también saben diferente debido a este procedimiento de cocción, ya que no tocan el agua y de esta forma mantienen todo su sabor. Y qué decir del bacalao, hablo del desalado, tiene tanto sabor y es tan delicioso. Con la mezcla de tan solo estos tres ingredientes nace un plato muy rico, pero si además le añadimos el pimentón de la Vera y el aceite de oliva virgen extra es ya lo más.
Ingredientes (para 2 personas):
Bacalao al punto de sal (1 o 2 piezas por persona)
1 manojo de berza gallega
3/4 patatas medianas
Pimentón de la Vera
Sal
Aceite de oliva virgen extra
En primer lugar lavamos bien las hojas de berza, quitamos el tallo (que se puede utilizar para caldos u otras elaboraciones), colocamos todas las hojas una encima de otra, cortamos primero por la mitad a lo largo, volvemos a colocarlas todas en un mismo montón y cortamos todas a la vez en cortes de 2 centímetros.
Las ponemos en una cacerola, si es posible en la vaporera, así luego nos servirá para hacer el resto del plato. Cubrimos con agua, añadimos un poco de sal y dejamos cocer durante 30 minutos.
Pelamos las patatas y las cortamos en rodajas de un centímetro, más o menos. Pasada la media hora de cocción de la verdura colocamos la vaporera y ponemos las rodajas de patata. Espolvoreamos ligeramente con sal, poca porque luego estará el bacalao encima. Dejamos que siga cociendo la berza y las patatas tapadas unos 15 minutos.
Colocamos el pescado sobre las patatas, con la piel hacia abajo. Dejamos cocer tapado hasta que el bacalao haya cambiado de color, de crudo a un blanco.
Servir inmediatamente en los platos. Cada cosa a un lado del plato.
Ya en la mesa cada uno se servirá el pimentón y el aceite a su gusto.