Si os gusta la ensalada campera clásica, la que se hace con bonito o atún, estoy segura de que esta ensalada con salmón fresco también os va a encantar, siempre que os guste este pescado. Es sencilla de hacer y tiene varias ventajas: una, que se puede preparar con antelación, dos, que puede ser plato único, tres, que es sana y un plato muy completo y cuatro, que la podemos llevar como comida a nuestro lugar de trabajo o a donde se quiera.

Ingredientes (para dos personas):

300 g de salmón fresco

2 patatas cocidas

1 cogollo de lechuga

2 huevos cocidos

1 tomate (si es pequeño 2)

1 cebolleta 

Aceitunas verdes sin hueso

Sal

Vinagre

Aceite de oliva virgen extra

Lavamos la lechuga y la ponemos en la ensaladera.

Cocemos las patatas y los huevos en una cacerola con agua que las cubra y añadimos una cucharada rasa de sal. Dejamos cocer, los huevos los sacamos a los 10 minutos, y las patatas seguirán cociendo durante 40 minutos más, se sabe que ya están cocidas cuando al introducir en la patata un cuchillo, éste sale fácilmente. Dejamos que se enfríen un poco para poder manipularlas. Pelamos y troceamos en dados ambos ingredientes. Lo ponemos todo en la ensaladera.

Lavamos el tomate y lo troceamos, así como la cebolleta.

Mientras se cuece la patata, quitamos la piel del salmón, nos lo pueden hacer en la pescadería, y lo cortaremos en dados. En otra cacerola ponemos agua y una cucharadita de sal y, cuando rompa a hervir, echamos el pescado, lo dejamos  cocer uno o dos minutos dependiendo de cómo lo queráis de jugoso, cuanto más tiempo más seco quedará, se trata de que el pescado cueza lo justo para que no quede crudo. Lo colamos y reservamos. 

Una vez frío lo añadimos a la ensaladera. Añadimos también las aceitunas. Echamos un poco de sal por encima, así como un poquito de vinagre y un chorreón de aceite, el aliño al gusto. Remover y listo para comer.