Apto para los vegetarianos, y si se emplea pasta sin gluten también lo es para los celíacos. Sencilla, rica, sana y económica, son las cuatro claves del éxito de un plato, además de nutritiva y baja en calorías, no se puede pedir más.

Ingredientes (para 4):

350g de macarrones (o de otro tipo de pasta)

2 cebollas rojas grandes

2 zanahorias

500g de setas de cardo

Aceite de oliva virgen extra

Sal

Cortamos en juliana las cebollas, las zanahorias y las setas.

En una sartén grande pondremos 4 cucharadas de aceite, a fuego medio, y añadimos la cebolla junto con la zanahoria. Rehogamos hasta que queden pochadas, es decir, hasta que quede transparente, blanda.

Podemos optar por añadir las setas al conjunto y seguir cocinando todo junto, hacer las setas aparte para que queden más doraditas, o como he hecho yo, apartar a un lado la cebolla más zanahoria, que sigan su curso, y en la otra mitad de la sartén saltear las setas y luego se mezclan con lo demás.

Mientras se va haciendo la verdura, ponemos una olla grande con abundante agua y dos cucharadas rasas de sal al fuego, cuando rompa a hervir añadiremos los macarrones, removemos y los dejamos cocer según el tiempo que indique el fabricante, siempre están los tiempos indicados al dorso de los paquetes. Removemos de vez en cuando para que no se peguen.

Escurrimos la pasta y la añadimos a la sartén mezclando todo junto dos o tres minutos, para que absorba los sabores de las verduras. Las setas que son más pequeñas las he salteado aparte, así sirven de decoración. Personalmente me gusta ponerle mucha verdura, casi tanto como pasta.