Hacer este tipo de pastas o galletas es rápida y el resultado es delicioso. A más de uno les gusta el no tener que utilizar la manga pastelera y hacerlo con una cuchara, así de fácil. Cuando se hacen, la casa se inunda de ese olor típico de las pastelerías, es tan agradable …. Estas pastas las hice hace ya unas semanas, para llevarlas a casa de una amiga que nos había invitado a comer, y que acompañaron a unas natillas de horchata que también llevé, y, tonta de mi, no les hice la foto cuando las puse en una bandeja, y fue cuando ya casi nos las habíamos comido todas cuando caí en ello, así que cuando las repita haré la foto. Hoy he hablado de ellas con una alumna y me ha pedido que las ponga, porque este fin de semana va a un cumpleaños y quiere llevarlas. También le he prometido poner la tarta de yogur, así lleva las dos cosas, receta que pondré mañana.
Ingredientes:
190g de mantequilla
150g de azúcar glas
250g de harina
Almendra picada
1 cucharada de leche
Comenzamos sacando de la nevera con antelación la mantequilla y el huevo. También encenderemos el horno a 200º para que esté caliente a la hora de meter las pastas.
Ponemos la mantequilla en un bol y la batimos ligeramente.
Añadimos el azúcar y volvemos a batir con las varillas.
Añadimos la leche y batimos.
Cuando el azúcar esté bien incorporado añadimos el huevo y seguimos batiendo.
Tamizamos la harina. Esta vez no utilizamos las varillas, vamos a mezclar con una espátula, con movimientos suaves.
Ya tenemos lista la masa, ha de quedar cremosa y algo ligera, si se quiere se puede utilizar la manga pastelera.
Ponemos papel de horno en la bandeja del horno. Y vamos repartiendo, con ayuda de una cuchara, bolitas de masa. Han de estar separadas, porque luego la masa se extiende y entonces se pegan unas a otras.
A continuación vamos echando un puñado de almendra picada. Esta almendra la venden preparada así, lista para utilizarla, merece la pena, es un trabajo que nos ahorramos y queda mejor. Como la almendra se cae por los lados, simplemente iremos arrimándola a las bolas de masa, éstas al crecer las incorporaran a la pasta.
Metemos la bandeja a la mitad de de la altura del horno, si se tiene ventilación ponerla,porque así se irán dorando al mismo tiempo. Si se tiene el horno con grill al mismo tiempo, poner la bandeja más abajo, y vigilarlas porque se doran con mucha rapidez, sin embargo, es mejor utilizar solo la parte inferior, y luego darles un ligero dorado con el grill, vigilando siempre. El horno a 200º (como ya he mencionado al principio) y unos 12 minutos más o menos. Una vez hechas sacarlas y ponerlas sobre una rejilla para que se enfríen, ver foto de arriba.
Así estaba la bandeja cuando hice la foto, apenas quedaban, la bandeja estaba hasta arriba y quedaba como si hubieran sido hechas de pastelería. Se pueden hacer con un par de días de antelación y luego guardarlas en una caja o recipiente hermético, duran varios días, bueno, no es verdad, nunca duran tantos días, se acaban antes.