Si tenéis un par de peras maduras no dudéis en preparar este rico bizcocho, os va a encantar. El poner fruta en los bizcochos, además de esponjoso, hará que éste sea algo más húmedo y no suba tanto como los bizcochos normales, es como una especie de tarta de Santiago, pero con otro sabor y otro aroma. Además conseguimos que sean más sanos y que de esta forma se coma más fruta. Por lo demás, al hacerlo, es igual de sencillo que el que normalmente hacéis, y para hacerlo más fácil utilizaremos un vasito pequeño de vino, o lo que es lo mismo, un vasito de los de yogur, ambos tienen la misma capacidad.

Ingredientes:

2 peras tipo conferencia maduras

2 vasitos de azúcar

4 vasitos de harina

3 huevos

1 vasito de aceite de girasol

1 vasito de leche

1 sobre de levadura química en polvo

Ponemos en una batidora la pera en trozos, lavada y con su piel. Batimos bien.

Añadimos la leche y los huevos y volvemos a batir. Reservamos.

En un bol ponemos la harina y la levadura tamizadas.

Añadimos el aceite.

Incorporamos lo batido en la batidora. Mezclamos bien todo hasta que quede una masa homogénea y fina.

Encamisamos un molde, el que más os guste. Yo he puesto uno cuadrado y algo más grande para que no saliera tan alto el bizcocho y se cociera mejor y en menos tiempo.

Vertimos la mezcla en el molde.

El horno ya lo tendremos preparado con antelación a 190ºC. Y solo la parte inferior del horno.

Metemos en el horno, una vez esté ya a su temperatura, y lo dejamos que se hornee por unos 45 minutos, para saber si está hecho se pincha con una brocheta y ésta tiene que salir limpia. Para que el bizcocho tenga un color más dorado en su superficie, ponemos el gril y estaremos atentos hasta que consiga el dorado que queremos. La foto de arriba es el corte del bizcocho, pero se puede apreciar que está doble, dos porciones una encima de otra.