Ya son varias las pizzas que he puesto con la base de tortilla de trigo, solo hay que ir al A, B, C … de las Recetas 2. La verdad es que al hacerse en la sartén se hacen rápidamente y, además de fácil, el consumo eléctrico es mucho menor que si se hacen en el horno, y ahora con lo que ha subido la luz merece la pena. Con este tiempo veraniego, y por lo dicho anteriormente, es cuando más apetecen, por lo menos a mí, aunque en cualquier momento del año sientan de maravilla.

Ingredientes:

Tortilla de trigo

Tomate frito

Pavo o Jamón de York

Queso mozzarella rallado

Alcachofas de bote pequeñas

Champiñones laminados en conserva

Queso fresco

Orégano

Aceite

Primero escurrimos bien las alcachofas y el champiñón. Las alcachofas las cortamos por la mitad. Lo hacemos a la plancha con un poco de aceite y reservamos.

Comenzamos encendiendo el fuego o la vitro, al mínimo. Ponemos una sartén, con una tortilla de trigo. La base de la sartén ha de ser igual que el de la tortilla de trigo. Extendemos el tomate frito, al gusto de cantidad, y espolvoreamos con orégano por encima. Mientras vamos colocando los ingredientes la pizza se irá haciendo al mismo tiempo, por este motivo el poner al mínimo la potencia, así se hará poco a poco.

Repartimos por toda la superficie queso mozzarella rallado y unas lonchas de pavo.

Volvemos a repartir las láminas de champiñón y las alcachofas.

Ponemos por encima las lonchas de queso fresco en rodajas. Una pizza de estas con un quesito pequeño es suficiente.

Volvemos a poner otro poco de queso rallado por encima. Y tapamos con una tapa para que se haga bien por arriba.

En el momento que veamos que el queso se ha derretido, comprobamos la base levantándola un poquito para ver que ya está dorada. Lista para comer.