No importa que sea verano o invierno, que haga frio o calor, este postre siempre va a gustar a todos. Queda muy bonito y está muy bueno, qué más se le puede pedir. Se puede utilizar, para acompañar, el helado que más os guste, e incluso poner una mezcla, yo he preferido poner los helados que tienen galleta, así parece que es un pequeño iceberg en el centro de la sopa. También se puede hacer la sopa de otros sabores. Esta vez he utilizado fresas congeladas, pero cuando es la temporada hay que aprovecharlas para hacerlo. Yo utilizo la thermomix porque la tengo, pero se puede utilizar cualquier otra batidora.
Ingredientes:
Fresas congeladas (o frescas)
Almíbar
Helado de sándwich de galleta con nata
Primero hacemos el almíbar con 200 ml de agua y 100 ml de azúcar. Ponemos a cocer unos minutos. Metemos en una botella y la guardamos en la nevera a que se enfríe.
Ponemos las fresas en el vaso, como unos 300 g, y batimos bien, ha de quedar fino.
Comenzamos a echar el almíbar que teníamos en la nevera poco a poco, hasta conseguir el espesor que queramos.
La sopa se puede tener preparada con antelación y servir el postre en el último momento. Servir en copas.
Cortamos cada helado en dos en diagonal y lo colocamos en el centro de la copa.
Listo para tomarlo.
