Este postre es un clásico, esta muy rico, la combinación de las fresas y la nata hacen que sea un postre de lujo. De lujo sí, pero con muchas calorías, por este motivo es un postre para un día de fiesta, porque hay que cuidarse y no abusar, lo digo por la nata. Las fresas tienen pocas calorías, muchas vitaminas y muchas ventajas, además están justo ahora en temporada, así que hay que aprovechar para consumirla.
Ingredientes:
- Fresas
- Medio litro de nata para montar bien fría
- 3 cucharadas de azúcar
Poner la nata en un recipiente, como una jarra, así se hace más rápido, ya que tiene profundidad y no es amplio.
Montar la nata con unas varillas, y añadir el azúcar.
Lavar las fresas sin quitar el pedúnculo, así no absorben agua. Trocearlas y ponerlas en una copa.
Echar la nata encima, al gusto.
Adornar con las fresas enteras, dejar las más pequeñas para esto.
Listo para degustar.
Guardar en la nevera la nata si no se va a usar en el momento. Si se quieren preparar con un poco de antelación el postre, entonces hacemos lo mismo con las copas, si se tiene espacio en la nevera, pero tiene que ser poco tiempo porque podría absorber la nata otros sabores de lo que haya en el frigorífico. Podemos hacer lo mismo con cuencos si no van a ser hechos los postres en plan bonito para una comida especial con visitas. Se pueden tener troceadas las fresas y se sirven las fresas y la nata en la mesa, cada uno lo que quiera.