Esta receta es la tercera de las cuatro que  hice para mi cumpleaños, las otras dos que ya están editadas son: Pastas con Almendra y Pastas de Almendra y Canela. Y como ya he dicho en las anteriores quedan estupendas, muy ricas y rápidas de hacer. Seguro que os van a gustar. Recordaros que las cantidades son las correctas, que veréis más cantidad de huevos en la foto porque hice el doble de lo que pone en la receta.

Ingredientes:

500 g de harina

300 g de mantequilla

150 g de azúcar

3 yemas

Almendra cruda en grano

Mermelada roja (del sabor que más os guste)

En primer lugar vamos a poner la mantequilla junto con el azúcar y vamos a batir muy bien ambos ingredientes. La mantequilla ha de estar a temperatura ambiente para facilitar el trabajo.

A continuación incorporamos las yemas de los huevos y batimos de nuevo.

Añadimos la harina tamizada.

Amasamos primero con una cuchara y después con la mano hasta que quede la harina bien integrada.

Echamos la almendra y volvemos a amasar un poco más para que quede bien mezclada.

Vamos haciendo bolas y las colocamos en una bandeja de horno forrado con papel de horno y a continuación las aplastamos ligeramente con la palma de la mano.

Con ayuda de una cuchara pequeña vamos haciendo un pequeño hueco en el centro superior de  la pasta que luego rellenamos con la mermelada.

Metemos la bandeja en la parte media, el horno precalentado a 180º C. Dejamos que se hagan durante unos 15 a 20 minutos, las primeras bandejas necesitan algo más de tiempo por eso hay que estar vigilando a partir de los 15 minutos, en cuanto estén ligeramente doradas las sacamos y dejamos enfriar en la misma bandeja, sin embargo si tenemos que hacer más y se necesita la bandeja, lo que hay que hacer es tirar del papel de cocina con cuidado y dejarla sobre la encimera para que terminen de enfriarse ahí mismo.

Ya he dicho que se conservan por varios días, pero en latas metálicas es donde mejor se conservan.