Esta es otra de las pizzas que hago con las obleas de totilla de trigo que se compran hechas. La verdad es que salen buenas, añadir que todos los que las van probando les encanta, porque queda una masa superfina, además de crujiente y rápida de hacer. Sé seguro que en cuanto las probéis las vais a hacer a menudo. Y lo mejor es que no se usa el horno.
Ingredientes:
Carne picada de ternera
Obleas de Tortilla de trigo
Salsa de tomate
Queso mozzarella (en lonchas y rallado)
Salsa Argentina
Aceite de oliva virgen extra
Orégano
Sal y pimienta negra recién molida
Para una pizza necesitaremos unas tres cucharadas de carne picada, todo dependerá del tamaño de la oblea y de la cantidad de carne, de relleno, que se quiera.
Ponemos aceite en una sartén, que cubra ligeramente el fondo. Cuando esté el aceite caliente añadimos la carne picada. Dejamos que se haga a fuego vivo, cuando veamos que se empieza a dorar le echamos por encima un poco de sal y pimienta, poca porque la salsa ya está sazonada.
Seguidamente le añadimos una o dos cucharaditas de salsa Argentina.
Removemos bien y dejamos un minuto para que se mezclen los sabores.
Una vez que tengamos ya preparada la carne, pasamos a poner la oblea de tortilla de trigo en una sartén que tenga el mismo diámetro, sin aceite y al mínimo de fuego, y desde la sartén fría y sin parar, vamos poniendo encima los ingredientes. Primero untamos con la salsa de tomate por toda la base.
Cubrimos con las lonchas de mozzarella.
Ponemos la carne, repartiéndola por toda la pizza.
Echamos orégano por encima.
Por último, añadimos el queso mozzarella rallado y tapamos con una tapa. Recordad que ha de hacerse al mínimo de fuego.
Cuando el queso esté fundido será el indicador de que la pizza está o casi está, comprobad levantando el fondo de la base y ved que está dorada. Lista para comer.