Esta receta de cuchara es muy aconsejable por muchos motivos: ahora estamos en invierno y da gusto comer este plato, es legumbre y se aconseja comerla por lo menos dos veces en semana, tiene muchos nutrientes, vitaminas y minerales ideales para nuestro organismo, y así hay unos cuantos motivos más, pero además son ideales para disfrutarlas en familia.
Hay ingredientes que casan con todo, las patatas es uno de ellos. Ya sea con carnes, con pescados o mariscos, con verduras, con embutidos, etc …, con cualquier ingrediente con el que se combine está bueno, el resultado es siempre positivo. Esta receta la recuerdo de cuando era niña, y me viene a la memoria que la coliflor no solía gustar en casa a todos, pero a mi me encantaba. El guiso de patatas es una de las recetas que suelo hacer y muy variadas, en el A, B, C, … de las Recetas las podéis encontrar, tanto en la 1 como en la 2.
Estas patatas de guarnición, o de acompañamiento, son ideales para cualquier plato, ya sean carnes, pescados, huevos, etc. Son similares a las patatas panaderas que se hacen en la sartén o en el horno, pero mucho más sencillas y fáciles. Es una opción que podéis probar y que seguro os va a gustar, ya que el microondas es una de las cosas más cómodas a la hora de hacer algo, porque se ponen los tiempos y no hay peligro de si se olvida el darles vueltas, no va a ocurrir que se peguen o agarren en el fondo del recipiente.
Ahora, en este tiempo, apetecen los platos de cuchara, y las legumbres son una buena opción, no solo para tener una buena alimentación, sino porque están muy buenas, son sanas, y al final, y algo muy importante, son económicas, porque con poca cantidad comen más. Es un primer plato que casi se puede convertir en único, con una buena ensalada y una o dos piezas de frutas después, estamos más que servidos. Esta calabaza que he utilizado es blanca, la tenían en el mercado ese día, aunque la clásica es de color naranja, cualquiera de ellas está muy buena.
Las patatas pueden combinar con cualquier otro ingrediente, carnes, aves, pescados, mariscos, verduras, …. y con cualquiera de ellos sale un plato realmente bueno. Esta vez he preparado las patatas con muslos de pollo, algo que a casi todos les gusta, y a los niños mucho, ya que eso de tomar el muslo con las manos les encanta. En el A, B, C … de las Recetas encontraréis más recetas de guisos con patatas.
Si os gusta la ensalada campera clásica, la que se hace con bonito o atún, estoy segura de que esta ensalada con salmón fresco también os va a encantar, siempre que os guste este pescado. Es sencilla de hacer y tiene varias ventajas: una, que se puede preparar con antelación, dos, que puede ser plato único, tres, que es sana y un plato muy completo y cuatro, que la podemos llevar como comida a nuestro lugar de trabajo o a donde se quiera.
Es el tiempo ideal de las ensaladas, y como no, de utilizar las legumbres ahora para comerlas de esta forma. Estos platos apetecen mucho más con el calor, ya que además de alimentarte, te refrescan y son rápidas de preparar. Se pueden hacer con antelación, y terminarla justo cuando se vaya a comer.
Una ensalada de legumbres es un plato bastante completo, y éste al llevar el bonito podemos decir que lo es, lleva todos los ingredientes que hacen que sea ideal para cualquier persona. Siempre os digo que si hay algún ingrediente que no os guste se puede cambiar o quitar, es lo que tiene la cocina que se pueden hacer variaciones al gusto de cada uno.
Este guiso que se hace con atún o bonito se le suele llamar marmitaco en el norte de España. Es un plato que lo tiene todo, así que bien puede ser un plato único con una ensalada. Todos los guisos que llevan patatas son para consumir en el día, ya que la congelación a la patata no le conviene porque no queda luego bien y lo mismo para el día siguiente, no queda igual, y es que la patata tiene ese problema. Pero esto no ocurre en otras preparaciones, como son la tortilla de patatas, los purés, … Este plato está muy rico, y el truco es no hacer demasiado el pescado para que éste esté más jugoso, porque sino queda seco.
Unas patatas con chorizo están muy ricas, si es verdad que son calóricas, pero merece la pena probarlas si no las habéis hecho nunca, y para aquellos que saben de lo que estoy hablando decir solamente que «buen provecho» y a disfrutar de este plato.
